Katalin Karikó (Szeged, Hungría, 1955) es una bioquímica, cuyo trabajo de desarrollo de vacunas contra el virus de la COVID-19 ha contribuido a salvar millones de vidas. Las investigaciones y descubrimientos que, junto al inmunólogo Drew Weissman, permitieron el desarrollo de vacunas de ARNm eficaces contra la COVID-19 les han hecho merecedores, a ambos investigadores, a ser galardonados con el Premio Nobel de Medicina 2023.
Katalin Karikó nació el 17 de enero de 1955 en Szolno (Hungría) y creció en Kisújszállás, un pequeño pueblo de 10.000 habitantes. Su familia, muy humilde, vivía en una casa de una sola estancia, hecha con adobe, sin agua corriente ni electricidad. Ella misma indica que era una niña feliz y que su interés por la biología quizá le venga de observar la labor de su padre como matarife, despiezando los animales y separando los órganos.
Katalin estudió en el Móricz Zsigmond Református Gimnázium; se concentró en sus estudios y quedó en tercera posición en un concurso nacional de biología cuando tenía catorce años. Se doctoró en la Universidad de Szeged (1982) y fue becaria postdoctoral en el Centro de Investigación Biológica de la Academia Húngara de Ciencias.
Se trasladó a los Estados Unidos con su familia en 1985, primero a Filadelfia para continuar sus estudios de doctorado y después como investigadora del ARN mensajero a la Universidad de Pensilvania, donde permaneció desde 1990 a pesar de que le iban denegando y rechazando todas las solicitudes de becas y de ayudas de financiación. Los evaluadores de sus proyectos consideraban que la terapéutica con ARN mensajero era muy arriesgada para invertir en ella por la gran reacción inflamatoria que producía y porque el ARN sería destruido antes de que llegase a actuar en las células. Esta situación duró una década.
La esperanza renació en el año 2000 cuando Drew Weissman, que acababa de llegar a la Universidad de Pensilvania, invitó a Katalin a trabajar en su laboratorio para intentar obtener una vacuna frente al VIH, causante del SIDA, con su nueva tecnología del ARN mensajero. Los primeros años de trabajo no fueron fáciles. Los resultados no fueron prometedores pues no lograban evitar una respuesta inflamatoria. En 2005 descubrieron que cambiando la secuencia genética del ARN se evitaba la respuesta inmune exagerada y además se aumentaba la producción de la proteína deseada. Este es el llamado ARN modificado, por esto, cuando un grupo de investigadores de los Estados Unidos fundó una empresa en 2010, que compró los derechos sobre las patentes de Katalin y de Weissman, la denominó ModeRNA, acrónimo de ARN (RNA en inglés) modificado. Casi a la vez, una pequeña empresa alemana fundada por dos inmigrantes de origen turco, BioNTech, adquirió otras patentes de los mismos investigadores orientadas al uso de ARN modificado para desarrollar vacunas contra el cáncer.
En 2020 llegó el coronavirus SARS-CoV-2 y ambas empresas, BioNtech y ModeRNA, desarrollaron vacunas contra la COVID-19 utilizando la tecnología de ARN mensajero que Karikó se empeñó en desarrollar a pesar de las dificultades. “Esto es algo increíble, porque significa que todo el trabajo que estuve realizando años enteros, durante la década de los 90, y convencer a la gente de que tal vez el ARNm sería bueno, valió la pena”.
En 2013, Katalin Karikó se convirtió en vicepresidenta de la empresa BioNTech y desde 2019 es vicepresidenta sénior de la empresa y compatibiliza su labor como investigadora académica y asesora de la empresa farmacéutica. Katalin espera que la tecnología ARNm se convierta en una plataforma universal para el desarrollo de medicamentos de última generación útiles para tratar enfermedades congénitas, cáncer y muchas otras patologías.
El ácido ribonucleico mensajero, conocido como ARNm, es una molécula que aparece cuando se copia un tramo de ADN y transporta esta información a la parte de las células donde se fabricarán las proteínas que componen nuestro cuerpo.
Ignorada y excluida durante décadas, desde 2020 ha cosechado diversos premios internacionales que, por fin, reconocen su perseverancia y compromiso ético. Entre ellos:
2021. En enero fue nombrada doctora honoris causa por la Universidad de Szeged, donde se graduó en Biología en 1978.
2021. En marzo fue galardonada con el Premio Széchenyi de Hungría.
2021. Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica, junto a Drew Weissman, Philip Felgner, Uğur Şahin, Özlem Türeci, Derrick Rossi y Sarah Gilbert, por su contribución científica encaminada a afrontar la pandemia de la COVID 19 y que “de forma independiente, contribuyeron al desarrollo de alguna de las vacunas aprobadas hasta la fecha, que tienen la proteína S como blanco común”.
2021. Premio Glamour Mujer del Año, que premia a mujeres “extraordinarias e inspiradoras” de diversos campos.
2021. Premio Héroe del Año de la revista Time.
2022.Premio Werner von Siemens Ring de Ciencias Técnicas, en Alemania.
2022. Premio Fronteras del Conocimiento en Biología y Biomedicina, junto a Robert Langer y Drew Weissman “por sus contribuciones a las terapias de ARNm y a la tecnología de transferencia que permite a nuestras propias células producir proteínas para la prevención y el tratamiento de enfermedades”.
2023. Premio Nobel de Medicina junto a Drew Weissmann por su descubrimiento de los mecanismos de modificación de base del ARNm que permitió el desarrollo de las vacunas para la COVID-19.
Fuentes
Reto Katalin Karikó
Comenzamos la Científic@ del mes de este curso escolar con esta fascinante científica. Cada mes publicaremos una científica con algunas preguntas a resolver. A final de año los ganadores recibirán su premio en Capitan Coin. Aquí tienes las preguntas de este mes.
1ª Pregunta:
La hija de Katelin Karikó ha sido medallista olímpica en remo en los Juegos de Pekín (2008) y Londres (2012). La deportista ha afirmado siempre : “Aprendí de mi madre los valores de luchar hasta conseguir tu objetivo”. ¿Cuál es el nombre de esta deportista?
2ª Pregunta:
El Nobel de Medicina 2023 se le ha concedido a Katelin Karikó y a su compañero, Drew Weissman por las investigaciones y descubrimientos que permitieron el desarrollo de vacunas de ARNm eficaces contra la COVID-19. ¿Cuál es la profesión de Drew Weissman?
3º Pregunta:
ModeRNA es el nombre de la empresa americana que compró los derechos de la patente de Karikó y de Weissman. ¿Cuál es su significado?
Contesta las preguntas en el siguiente formulario
Animo !!!!